Como criador de animales, tu función implica la cría y el manejo responsables de animales para mejorar rasgos o características específicos. Aunque tu trabajo gira principalmente en torno al cuidado y la propagación de los animales, hay consideraciones importantes para tu bienestar y el de los animales a tu cargo.
Si tu trabajo incluye la alimentación frecuente de animales, los nutrientes suministrados en la comida podrían estar complementados con sustancias potencialmente peligrosas, por lo que el objetivo de una manipulación baja en polvo debe ser de alta prioridad. Si tu trabajo incluye tareas frecuentes de limpieza o descontaminación, podrías estar expuesto al formaldehído, que puede tener propiedades Cancerígenas. Por último, si tu trabajo implica la manipulación de vehículos alimentados con combustible, la exposición a emisiones de motores diésel es muy probable en naves cerradas.
Por lo tanto, cumplir los protocolos de seguridad, instalar una ventilación adecuada y utilizar equipos de protección individual (EPI) apropiados, si es necesario, es esencial para minimizar los riesgos asociados a las sustancias peligrosas que pueden estar presentes al manipular animales.